Antes de recoger los frutos de la cosecha es necesario trabajar la tierra, regarla, cuidarla, limpiarla y esperar las lluvias, buen clima, etc…, multitud de factores que intervienen para obtener el preciado regalo del esfuerzo y el trabajo….LOS PRIMEROS FRUTOS.
Así nos sentimos hoy día en Bayaka. La andadura de nuestro centro y el duro trabajo desde que comenzamos el año en Agosto está en camino de comenzar a dar sus primeros frutos.
El cambio integral que hemos dado en todos los aspectos tras la evaluación del año anterior ha generado muchos cambios que hacen de Bayaka un centro mejor y más adaptado a lo que estos niños necesitan
La escuela se ha consolidado como un verdadero lugar donde los niños aprenderán a leer, contar y escribir en francés, para ser capaces de desenvolverse en la sociedad chadiana donde la mezcla de lenguas hace imprescindible el conocimiento de una lengua como es el francés para poder progresar.
La granja-escuela también comenzó su curso con las primeras lecciones teóricas sobre el cultivo de los campos, las técnicas para el labrado y la cosecha y las primeras nociones sobre cómo hacer su propio huerto. A día de hoy ya hemos recogido el cacahuete, el maíz, el mijo “penicilaire”, el mijo rojo y trabajamos por terminar de cosechar el sésamo y la comida que guardaremos para los animales en época seca.
El huerto da sus primeros pasos y ya han creado los primeros semilleros de zanahorias, cebollas y tomates, tendríais que ver las caras de los niños cuando levantan la paja que cubre las planchas para mantener la humedad y ven que su trabajo ya tiene un pequeño tallito verde
En la tarde, para intentar compaginar el aprendizaje en los talleres, el refuerzo escolar, los trabajos cotidianos del centro y la diversión, el horario baila dividiendo a los niños por grupos de edad, por habitaciones, por capacidades etc. un verdadero rompecabezas gracias al que todo es posible a su debido tiempo y adaptado a las posibilidades de cada uno.
Los talleres profesionales tan ansiados por los niños han comenzado ya su curso. A ellos asisten los alumnos que ya llevan un año con nosotros y los que son más grandes para ir encaminándolos a una posible salida profesional en el futuro. La costura y la carpintería hacen que estos niños se transformen por unas horas a la semana en adultos que muestran interés, ilusión y afán por aprender el oficio que les podrá asegurar su futuro… ¿serán conscientes de la realidad tan difícil que viven fuera del centro y por eso muestran tanto interés?
Este año contamos con la ayuda de cuatro jóvenes para completar esas tareas que os hemos relatado.
Ellos se encargan del refuerzo escolar completando lo que los niños aprenden en la mañana y remarcando lo más importante en cuanto a lectura, escritura y cálculo. También ayudan a los niños a turnos para limpiar las salas de clase, sus cuartos y la sala común; rellenar los “canari” (recipientes de barro donde se conserva el agua fresca) y lavar su ropa y a ellos mismos ya que quien hasta hace poco dormía en el mercado no es capaz de entender que tiene que estar limpio, lavar su ropa y cambiarse o simplemente mantener recogido su entorno. Poco a poco también en esto vamos viendo los cambios.
Dentro del ocio y las actividades lúdicas de este año, y junto al cine, el deporte y la danza que ya realizábamos hemos comenzado nuestra pequeña coral, las excursiones fuera del Centro y las reuniones de “kemkogi”, un movimiento que enseña a los niños valores positivos a través de juegos, canciones…
Como podéis ver empezamos a recoger los primeros frutos tanto en el campo por la cosecha, como con los niños gracias a este nuevo proyecto que sigue manteniendo la misma ilusión, ganas y esperanzas que el año anterior pero con la experiencia ya de un primer año
El trabajo no se queda aquí pues las dificultades y los contratiempos siempre llegan, pero gracias a nuestro esfuerzo y también al vuestro a través de vuestras colaboraciones y aportaciones seguro que podremos seguir esperando muchos más frutos que os iremos contando.
Todos, nosotros y vosotros, seguimos enganCHADdos a esta misión…
